La huerta no es sólo para el jardín. También en casa, en el balcón, o con el césped artificial puedes disponer de tu propia cosecha, porque hay especies que, además de resultar muy decorativas, son fáciles de cultivar en jardineras y macetas, como los tomates y las fresas. Hoy te damos unos consejos para cultivarlos.
Fresas
No exigen una tierra profunda, así que se pueden plantar bien en macetas o, mejor, en jardineras de las que se usan en los alféizares de las ventanas, donde caben hasta tres plantas. Colócalas a pleno sol, y si lo haces en un lugar elevado, al colgar los frutos evitarás que se manchen de tierra. Planta en abril-mayo o entre agosto y octubre, por semillas o, más fácil, en plantones. Es importante que a principios del verano elimines los largos estolones que terminan con un grupo de hojas para que no consuman toda la energía de la planta.
Tomates
Su variedad es inmensa, pero para la terraza o el balcón te recomendamos los de fruto pequeño, llamados “cereza”, ya que no necesitan poda y puedes dejar que las ramas se enreden libremente. Necesitan una jardinera o maceta profunda y grande, de unos 30x30 cm de madera o terracota, situada a pleno sol. Las matas requieren espacio y luz, así que separa del resto unos 25 cm. Siembra de febrero a abril y tendrás fruto cinco meses después. Si plantas a pie tagetes, lo protegerá y resultará además decorativo.